La última tendencia en suplementos proteicos es el colágeno y se promociona como «científicamente probado para disminuir el dolor articular.» Ningún otro suplemento nutricional dice tener este efecto.

¿Por qué el colágeno y qué tiene que ver con nuestras articulaciones? El colágeno es el principal componente del tejido conectivo en el cuerpo, comprende una cuarta parte de nuestra masa corporal.

Si no tenemos suficiente colágeno, nos podemos enfermar. El escorbuto y la osteogénesis imperfecta son dos enfermedades muy serias ocasionadas por la carencia de colágeno. Pero, curiosamente, ¿adivine qué es lo que no funciona como tratamiento para estas enfermedades? Comer colágeno. Eso es debido a que el colágeno es el producto de un proceso de síntesis elaborado que se produce en todo el cuerpo. Cuando comemos colágeno, por lo general en forma de alimentos, las proteínas de cadena larga como el colágeno se descomponen durante la digestión a sus aminoácidos originales. Sólo en esa forma pueden ser absorbidos y estar disponibles para ayudar en la síntesis de colágeno. Así que desde el punto de vista dietético, a nuestro cuerpo no le interesa (y no puede saber) si uno ha comido un suplemento de colágeno, o queso, quinua, carne de res o de pollo, todas éstas fuentes de proteínas, e indistinguible en el momento en que llegan a la sangre. El cuerpo no trata a los aminoácidos derivados de colágeno de manera diferente que a cualquier otra fuente de proteínas. Por esta razón, la idea de que la administración de suplementos de colágeno pueda ser un tratamiento eficaz para el dolor de las articulaciones, la osteoartritis, o cualquier otra enfermedad, es altamente improbable.

Es posible que los suplementos de colágeno proporcionen algún beneficio clínicos para los dolores articulares, pero ciertamente no hay evidencia convincente que sugiera que es el caso. Sobre la base de lo que es el colágeno, cómo se absorbe y cómo se sintetiza en el cuerpo, no parece que el consumo diario de este producto tenga efectos terapéuticos significativos.