Pregunta medio difícil. Dormir bien cuando hace tanto calor es complicado. Cuando dormimos con el aire acondicionado encendido, se reseca la mucosa respiratoria, disminuyen las defensas locales y facilita la adquisición de infecciones o procesos alérgicos.
¿Qué podemos hacer?
Usar nomás el aire acondicionado. Pero tomando algunas precauciones: NUNCA deje que el aire frío le llegue directamente a la cama de su hijo. Dirija el aire hacia la pared. Que el aire no esté demasiado frío. Disminuir un poco la temperatura ambiente ya hace la diferencia. Así que 23 o 24 grados está bien. Coloque una toalla húmeda en la habitación para que no se reseque el ambiente.
Este consejo puede aplicarlo no sólo cuando duerme sino también en ambientes en los que el calor sofocante lo obligue a encender el aire acondicionado.
¡Siga estas precauciones y dulces sueños!

Endocrinólogo, transplantado renal, columnista de salud, convencido que las palabras y las acciones pueden cambiar el mundo.