La diabetes mellitus es una de las principales causas de insuficiencia renal

Cada persona tiene dos riñones, con forma de frejoles, localizados detrás de los músculos de la espalda. Estos órganos sirven de varias maneras: ayudan en la producción de sangre, en la síntesis de vitamina D, en el control de la presión arterial, pero su tarea principal es la de lavar la sangre, a través de un sistema complejo.

Cada riñón tiene aproximadamente un millón de nefrones (tubos pequeños). Un nefrón está compuesto por el glomérulo y sus túbulos asociados. La sangre se filtra primero en los glomérulos; este líquido inicial luego es modificado en el túbulo. La urea, creatinina, sales, medicamentos y otros deshechos son eliminados por la orina. Cada minuto fluyen 1,3 litros de sangre a través de los riñones y cada día se eliminan 1,5 litros de orina.

La diabetes mellitus es una de las principales causas de insuficiencia renal. Cuando una persona ya tiene nefropatía diabética se observa bajo el microscopio la destrucción de los glomérulos, que es la estructura responsable para la filtración inicial de la sangre.

Una señal temprana de éste daño es la presencia de proteínas en la orina, que comienza con pequeñas cantidades llamadas “albuminuria”. Conforme el daño a los riñones va empeorando, se observa mayores cantidades de proteínas en la orina, esto se llama “proteinuria”. Posteriormente, la capacidad de los riñones de filtrar y lavar la sangre se ve alterada y los productos de deshecho se acumulan en la sangre, esto se llama “insuficiencia renal”.

Aproximadamente un tercio de las personas con diabetes desarrollarán enfermedad renal (nefropatía). Las personas con diabetes tipo 1 que desarrollen nefropatía, lo harán una década o más después del diagnóstico de la diabetes. Si después de 25 a 30 años de tener diabetes no tienen enfermedad renal, probablemente ya no la presentarán.

La diabetes tipo 2 es mucho más común que la tipo 1, por lo tanto hay más casos de nefropatía diabética. Algunas personas tienen albuminuria al momento del diagnóstico de la diabetes tipo 2, lo que nos indica que éste tipo de diabetes puede pasar desapercibida por años.

La genética también tiene su rol. Si un familiar tiene diabetes y enfermedad renal, probablemente uno está más propenso a tener enfermedad renal que alguien cuya familia esté libre de estas enfermedades.

Una persona puede perder dos tercios o más de sus riñones antes de sentir algún síntoma. La insuficiencia renal, por lo tanto, es similar a la presión arterial alta que puede ocurrir silenciosamente sin que nos demos cuenta del daño.

¿Cómo puede protegerse de la enfermedad de los riñones si ya tiene albuminuria o peor aún proteinuria en su orina? ¿Cómo puede disminuir su progresión?

Control estricto de los niveles de azúcar en la sangre.
Control de la presión arterial.
Uso de medicamentos inhibidores de la ECA (protectores de los riñones) si ya hay albuminuria.
Control de los niveles del colesterol (factor de riesgo para proteinuria).
No fumar
Dieta adecuada
Finalmente, control periódico con su médico