Perder 5 kilos o un 5 al 10 % del peso corporal actual y no volver a subirlo, hace una gran diferencia en la salud de las personas.

Los beneficios se ven rápidamente. Esta pequeña disminución de peso disminuye el colesterol en la sangre y regulariza la presión arterial además, disminuye el riesgo de tener diabetes y enfermedades del corazón. Y, si ya tuviera una de estas enfermedades, le ayudará controlarlas.