El procedimiento para hacer un tatuaje debe estar libre de riesgos. Exactamente cómo una intervención quirúrgica. Eso significa que los profesionales deben estar preparados y los materiales utilizados deben ser esterilizados debidamente. Sin embargo, como todavía hay centros de dudosa confiabilidad. Se debería esperar por lo menos un año para poder donar sangre. Ese es el tiempo necesario para que, si ha habido algún contagio, los estudios de laboratorios puedan detectarlo. Así que, ES VERDAD: quién se hace un tatuaje debe esperar por lo menos un año para ser un donante de sangre.

Endocrinólogo, transplantado renal, columnista de salud, convencido que las palabras y las acciones pueden cambiar el mundo.