Pintar las uñas de colores fuertes, exuberantes y brillantes están de moda. Esto incluye, por supuesto, los esmaltes de tonos más oscuro como el rojo o el negro. Las uñas quedan hermosas. El problema viene después. Cuando se retira el esmalte, queda un desagradable tono amarillento en las uñas. Esto sucede porque los esmaltes oscuros liberan pigmentos que son absorbidos por la lámina ungueal.
Para evitarlo, se recomienda aplicar una buena base antes del esmalte. Y, alternar los esmaltes oscuros con otros de tonos más claros.
Así que, es VERDAD: el esmalte oscuro amarillea las uñas.

Endocrinólogo, transplantado renal, columnista de salud, convencido que las palabras y las acciones pueden cambiar el mundo.