El riesgo de diabetes aumenta conforme se sube de peso
Es alarmante el aumento de la prevalencia de diabetes tipo 2 en el mundo y mucho más en Bolivia. Este incremento está directamente relacionado con el sobrepeso.
La obesidad y la diabetes tipo 2 no siempre vienen juntas. No todo el que tiene sobrepeso desarrolla diabetes y no todo el que tiene diabetes tipo 2 está con sobrepeso. La probabilidad de desarrollar diabetes cuando se tiene sobrepeso depende de la interacción de una serie de factores: qué tanto sobrepeso tiene una persona, su nivel de grasa abdominal, la predisposición genética a desarrollar resistencia a la insulina, la capacidad de producción de insulina de la persona. Actualmente sabemos que el 80% de las personas con diabetes tipo 2 tienen sobrepeso u obesidad.
A partir de la década de los 90 ha habido, tanto en países ricos como pobres, un notable aumento de la obesidad. Es muy probable que con el crecimiento acelerado de la obesidad impulsen a la diabetes hacia un crecimiento mucho más importante de lo que se calcula actualmente, ya que los cálculos no han tenido en cuenta la epidemia de la obesidad.
¿Pero se podrá disminuir la probabilidad de una persona concreta de hacerse obesa? Hay indicios de que, si se puede, pero es importante prestar atención a una serie de factores de riesgo modificables como, por ejemplo: la nutrición materna adecuada durante el embarazo, introducir sabores variados a los bebés cuando concluye la lactancia materna, desarrollar el gusto por el consumo de frutas y verduras desde edades tempranas, estimular la actividad física durante la infancia, consumir alimentos que no sean ricos en grasas y dulces.
Se calcula que al menos la mitad de todos los casos de diabetes se evitarían si se pudiese prevenir el aumento de peso en los adultos.
Diversos estudios han demostrado que con ciertos cambios en el estilo de vida se puede disminuir el riesgo de desarrollar diabetes tipo 2 hasta en un 60%. Estos cambios tienen que ver con aumento de la actividad física, una dieta saludable y pérdida de peso.
Ya que han sido los grandes cambios, tanto hacia la inactividad física como en la alimentación, los que explican el desarrollo de la crisis de obesidad y diabetes, es necesario tomar medidas para tratar ambos problemas. La epidemia de obesidad y diabetes se ha desarrollado en parte porque no existe un esfuerzo de los gobiernos ni de la sociedad misma en promover el valor de la alimentación sana y equilibrada y tampoco estimulan ni dan las condiciones a la población para realizar ejercicio.
¡Es tiempo de actuar ahora! Debe existir educación para la salud que apoyen medidas concretas para no caer en estas enfermedades: ofrecer a los niños una amplia variedad de actividades físicas, diseñar nuestra ciudad de manera que estimule hábitos saludables para todos, enseñar hábitos de comida saludables y ofrecer alimentos nutritivos en las escuelas, hacer un seguimiento del peso de los niños, no concentrar alimentos ricos en dulce y grasas en los refrigeradores, no repetir plato a la hora de las comidas o servir raciones más pequeñas, que se bajen los precios de los alimentos sanos, etc.

Endocrinólogo, transplantado renal, columnista de salud, convencido que las palabras y las acciones pueden cambiar el mundo.