Muchos estudios han examinado la relación entre la religión o la fe y la salud de un enfermo, pero este tipo de investigación genera conflictos.
Hay mucha controversia en función de con quién se hable, porque cada uno tiene sus prejuicios personales, y esos prejuicios son muy fuertes.
Hay más de 500 estudios publicados desde 1872 hasta la fecha y, la mayor parte de ellos, muestran que la religión o la fe tiene un impacto positivo en la salud de un paciente. Sin embargo, algunas investigaciones son contradictorias, por ejemplo:
En un estudio, publicado en la revista “Journal of Behavioral Medicine”, los investigadores entrevistaron a 177 pacientes cardíacos adultos, dos semanas antes de su cirugía de corazón. Encontraron que los pacientes que rezaron más antes de la cirugía experimentaron menos complicaciones después de la cirugía.
Por otro lado, en un estudio más grande, publicado en la Revista “Journal of Alternative and Complementary Medicine”, en donde se realizaron encuestas a más de 2.000 sobrevivientes adultos de cáncer en los EE.UU. El estudio encontró que el 69 por ciento de los encuestados confirmó que habían rezado por su propia salud. Sin embargo, aquellos que oraron menos o nada reportaron un mejor estado de salud con mayor frecuencia que los que rezaron más.
Me parece que los médicos deberíamos considerar la religión o la fe en el cuidado de los pacientes.
Esto es algo que cada vez se valora y reconoce más, si el médico es religioso o no…no importa. Lo que debería importar es la fe del paciente.
Personalmente creo que los efectos de la religión o la fe en la salud de un paciente son beneficiosos y en el peor de los casos inofensiva, siempre y cuando se siga los tratamientos médicos indicados.
Ser médico es una posición muy honorable. La gente lo mira a uno con esperanza y muchas veces con admiración, y es fácil para nosotros los médicos que inflemos nuestros egos debido a eso. Si Jesús es un ejemplo para la forma de cómo uno debe ser, entonces podemos utilizar la profesión como una oportunidad de servir a los demás.

Endocrinólogo, transplantado renal, columnista de salud, convencido que las palabras y las acciones pueden cambiar el mundo.