La diabetes puede causar alteraciones de las contracciones normales del estómago y los intestinos que mueven los alimentos a lo largo del tracto digestivo (peristaltismo). En personas con diabetes y gastroparesia, este movimiento se hace más lento, y los alimentos se quedan más tiempo en el estómago. Esto a veces puede causar náuseas y vómitos.
Los niveles altos de glucosa en sangre (hiperglucemia) contribuyen a esta desaceleración del movimiento estomacal e intestinal. Si la hiperglucemia ocurre durante un período prolongado de tiempo, puede causar daño a los nervios que irrigan el estómago, una afección llamada neuropatía autonómica, que empeora la gastroparesia y hace que sea muy difícil de controlar. La glucemia alta es la causa de la gastroparesia. Sin embargo, ciertos alimentos pueden empeorar los síntomas de la gastroparesia, como los alimentos grasos, la cafeína y el chocolate, que pueden relajar el esfínter esofágico inferior (la válvula entre el esófago y el estómago). El tratamiento más efectivo, si el inicio de la gastroparesia es reciente, es que disminuir agresivamente los niveles de glucosa en sangre a los niveles normales y mantener la hemoglobina glicosilada A1C por debajo del 7 por ciento.
Algunas personas con diabetes y gastroparesia que solo toman medicamentos orales, deben cambiar su tratamiento a insulina para poder mejorar.

Endocrinólogo, transplantado renal, columnista de salud, convencido que las palabras y las acciones pueden cambiar el mundo.