Cuando nos despertamos hemos estado muchos horas sin comer y nuestro organismo necesita prepararse para las actividades del día. Por eso es importante tener un desayuno completo, nutritivo y ligero.
- Incluya leche, es rica en calcio y es importante para todas las edades. Puede tomar café o chocolate. Si le gusta el café negro, no hay problema. Mejor tomarlo antes o después de un vaso de leche. Para los que no les gusta la leche, la opción es comer yogur.
- Coma fibra, es buena para la salud de su corazón y ayuda al funcionamiento intestinal. Pude elegir entre granola, linaza, germen de trigo o avena y póngalo en leche, yogur o fruta.
- Añada fruta, porque son livianas, fáciles de digerir y ricas en vitaminas.También tiene fructosa, un carbohidrato que ayuda a dar energía para afrontar el día. Para tener variedad, puede picar la fruta en el yogur. ¡Es delicioso!
- Puede comer pan, es sabroso, pero no exagere en la cantidad. Y para acompañar, prefiera queso blanco en lugar de mantequilla o margarina. ¡Es más saludable!
Un desayuno saludable es más sencillo que estar comiendo tocinos o panes dulces: leche o yogur, café, fruta, pan con un poco de queso.