Muchas veces comemos porque estamos aburridos, estresados, ansiosos, cansados o simplemente porque la comida está ahí. ¡Pero esas calorías incidentales se acumulan de verdad! Así que la próxima vez que se sienta tentado a comer por uno de esos motivos, coma algo que no sea dulce o grasoso, busque alternativas saludables como frutas o yogur. Usted verá que su recuento diario de calorías baja y la pérdida de peso mejora.

Endocrinólogo, transplantado renal, columnista de salud, convencido que las palabras y las acciones pueden cambiar el mundo.